Primer día en Haití 31 de enero 2010



Hoy es mi primer día en Haití. Ya han pasado muchas horas desde que salimos de Santo Domingo. Hemos recorrido ciudad tras ciudad, conversación tras conversación y cada minuto nos acercamos más a la frontera. En el camino aprendo, de las conversaciones de quienes han vivido más que yo; observo, un seco paisaje que plasma su belleza por medio de la majestuosidad de cada montaña, pradera o cordillera. Pensaba, en lo que dejaba atrás y en lo que perseguía hacia adelante. Tantas cosas pasaban por mi mente. Era el día de mi Gran Kermes, la venta de comida con la que recaudaría mis fondos. Mientras me acercaba a mi destino toda una iglesia se esforzaba por dar lo mejor de si para enviarme. Trabajaban incansablemente por recaudar mis fondos, se entregaron hasta más no poder por hacer algo por esta causa, impactaron mi corazón y me agradecieron por hacerlos útil en este proyecto. No lo podía creer, al final de todo había tenido tanto apoyo. Desde el mas pequeño hasta el más grande se entrego por hacer realidad este sueño, el sueno de Dios. En un momento me había visto tan solo, tan desamparado en este proyecto que no sabía como terminaría. Ahora las cosas habían cambiado. El que soportaba un proyecto en sus hombros, ahora lo soporta con los hombros de mucho. Ya no era mi carga, era la de una iglesia, la de un pastor, la de una familia, la de un amigo, una dama, un joven y a última hora, de un concilio. Lo que no tenia forma tomo, y lo que parecía se convertiría en fracaso ahora era parte del proyecto más importante del momento.


Las voces de mucho que decían no, pasaron por mi mente. Es peligroso, no vallas, espera un tiempo, no te arriesgue, no lo hagas, no. Eran más las voces de los que decían no que la de aquellos que dijeron sí, pero los que dijeron sí, me lo dijeron con hechos. Ellos fueron mi soporte. Me prepararon, me enviaron, me dieron una oportunidad, creyeron en mí, y aquí estoy, camino a mi experiencia misionera que seguro marcara el inicio de una nueva etapa en mi vida.
El camino seguía y parecía interminable. Del otro lado de la ventana percibía un mundo muy distinto al mío en muchos aspectos. Mientras más entraba en lo profundo del sur, mas grande era la pobreza, mas latente era la necesidad, más oscuro parecía el camino. A pesar de todo estaba más que emocionado por llegar, sentía un gran respaldado, un fuerte apoyo moral y espiritual.


El día anterior había sido tan intense, fueron tantas las reuniones, las filas largas en bancos, el trabajo para obtener una visa, el trasporte en metros, carros y buses. El cansancio fue tan intense, pero jamás pudo vencerme, no ahora. Tenía las fuerzas para seguir, para llegar a mi destino, para marcar la diferencia. No me detuvo la falta de dinero, no lo hizo la falta de equipos, no lo hizo el miedo, que en momento recorrió todo mi cuerpo, no lo hicieron las malas opiniones de mucho, no lo hizo una réplica del terremoto, no lo hicieron las bacterias, no la muerte que estaba propensa. Sabía que tenía un llamado y una sola oportunidad para hacer realidad lo que Dios había puesto en mi corazón, y lo hice, tome una decisión.
Ya estoy en Jimani, el último pueblo, el lugar de la frontera, donde seré entregado en manos de los haitianos. Me sorprende que estén aquí tantas personas importantes para entregarme. Desde la jerarquía del Súper Intendente Miguel García hasta la tierna gracia y amista de mi amiga Arisela Morel. Amigos, pastores, líderes y compañeros. Ya no sería lo mismo, tenía todo un concilio que representar en aquel país, toda una responsabilidad antes mis lideres más grande y ante cada hermano que doblo sus rodillas y oro por mí, pero sobre todo una gran responsabilidad ante Dios. Entre puntos y acuerdos entre los concilios llego la hora de sellar mi pasaporte y como dijere mi compañero Ovalle, Cruzara al otro lado.


Haití, entre a este lugar, comencé mi estadía en una tierra abatida por el dolor, la angustia y la desesperación. No me recibieron con una bienvenida como se acostumbra recibir a un misionero, no hubo presentaciones de nombres y formalidades, no en ese momento; solo tres camiones de comida, agua y medicina para descargar y almacenar. Cansado por un viaje de más de diez horas, con ansias de comer y descansar en una cómoda cama comencé a descargar paquete por paquete todas las ayudas que habíamos llevado. La comida debía esperar, también la cama. Fue la primera vez que mis sentidos no respondían como debían, pero no podía parar, aun quedaba mucho por hacer esa noche. Después de este arduo trabajo terminamos y salimos a casa. No me esperaba el rico plato de cena que como de costumbre solía tener en casa, o la espaciosa cama en una habitación segura y confiada en la que dormía; me esperaban latas. Latas con comida, no era mi costumbre, pero allí comenzó a serlo. Dormir con la ropa puesta, la mochila a un lado, una lámpara eléctrica a tu alcance, en el medio de la sala, listo para salir corriendo y con las puertas casi abiertas, era una nueva modalidad que debía aprender; no quería quedar atrapado bajo los escombros. No olvidé la parte del baño, solo que en estos casos solo nos toca algunas veces a la semana, y no era ese día. Termine escribiendo en mi diario: A este lugar, lo define la palara trabajo y supervivencia.

Creo que podemos cambiar el mundo




Tic . . . tic . . . tic . . . tic . . . tic . . . tic . . . cada diez segundos veintiséis personas mueren en nuestro mundo. De estas veintiséis personas, dos son budistas, cuatro son hindúes, cinco son musulmanes, ocho son seculares, siete cristianos, de la cuales tres son protestantes. Cada diez segundos por lo menos veinte individuos mueren sin Cristo.

Vivimos en un mundo que sea caracterizado por su crisis. Hay cincuenta guerras civiles que han encendido en varias partes del mundo. La guerra de la droga en todo el mundo continúa extendiéndose. Nuestro país es blanco que está pasando a través de un pantano moral que comienza en casa y se filtra a través de toda la nación. Parece que estamos caminando de una tragedia interminable a otra.



Incluso en nuestras vecindades, calle arriba y calle abajo, vemos crisis tras crisis. Todas las clases de abusos tales como físico, sexual, emocional, drogadicción, entre otros ocurren diariamente en nuestras ciudades. El fuego se ha encendido. Los gritos de nuestra comunidad se han levantado a Dios.


Que aremos….


Seras de los que se quedan sentados esperando que algo suceda… O seras de aquellos que se levantan y provocan el cambio. Tu tienes el poder para cambiar el mundo. Se que podemos. Quizas sea anbicioso, pero es lo que creo y quiero. Vamos, cambia una vida, primero la tuya y despues la de otro. Cabiemos lo pequeño y llegaremos a lo grade.

Ministros

Somos de carne y hueso, sentimos, sufrimos y si, lloramos. Día tras día nos levantamos haciendo realidad los sueños de los de mas y en ocasiones destruimos los nuestros. Logramos que la gente formen sus vidas mientras que la nuestra por momentos se desborona.

Quisiéramos no seguir, dudamos en ocasiones, soltar la toalla seria lo mejor, eso decimos, pero no lo hacemos. ¿Por qué? Por Dios, por la gente, porque nadie lo haría si nosotros no lo hacemos, y claro, por el corazón que tenemos. Corazón que sufre con los que sufren y llora con los que llora, y corazón que se da, aun por los sueños de aquellos que no ha conocido.

Ministramos sin ser ministrados, sonreímos para hacer feliz a otro y por dentro lloramos. El dolor nos arropa detrás de la puerta y al abrirla tenemos que brindar `paz, alegría y descanso. Buscamos la perfección de los santos y vivimos con la realidad de ser imperfectos. Brindamos esperanza cuando aún no hemos visto la nuestra. Nos exigen ser intachables, y no podemos.

Conquistamos vidas, iglesias enteras, naciones, el mundo, pero en muchas ocasiones no podemos conquistar el corazón el corazón de la mujer que amamos, el hijo que tenemos o el familiar que ya nos extraña. Nos importa tanto la gente que olvidamos lo nuestro, lo que nos pertenece, eso que amamos, y entonces pensamos, que no existe otra forma, que tengo que vivir sacrificado y ponemos la excusa de que es cuestión del llamado. Cuando los problemas nos llegan y nuestras familias se acaban, cuando los hijos se alejan y el matrimonio se apaga ponemos la culpa en el sistema que existe, en las iglesias que vamos, en el Dios del llamado o en cualquier hermano; pero jamás miramos el corazón imperfecto que por dentro llevamos, el error del extremo de inclinarnos a un lado. Y ponemos excusas, y buscamos otra oportunidad, otro momento para volver a intentarlo y creemos estar bien porque ayudamos a otros, creemos tener familias sanas porque sanamos a otros, pero no, no es lo cierto; el error es nuestro.

Olvidamos las prioridades y creemos hacer lo correcto, pero fallamos. Lo dice una pastora que no se siente amada, lo dice un hijo que anhela que su padre lo escuche, lo dice un hermano que extraña compartir un rato con aquel llamado ministro; pero las personas se alegran porque ven que das tanto, pero lo que ellos no saben es la realidad que nos golpea por no ser equilibrados.
Reaccionemos, nosotros también tenemos sueños y Dios quiere que lo vivamos, encontremos la forma de ser el héroe de nuestras propias casas, el regalo preciado de quienes nos rodean en los tiempos buenos y malos. La admiración de nuestras esposas, el cariño de nuestros hijos, el aprecio de nuestro hermano y ganemos lo que es nuestro antes de ganar lo que no lo es o pagaremos el alto precio de perder lo que se nos ha regalado.

Que no sea tarde para que lo pienses…
…y si lo es, es tiempo de comenzar a cambiar.

Foco Misionero

Misiones, algunos han escuchado de ella, a otros no les interesa, pero a otros, los apasiona, siendo una fuerza latente que los lleva hasta los lugares más remoto de la tierra. Muchos sienten esta responsabilidad, oran, ofrendan y hasta van a las naciones; para otros, pasajes como los de Mateo 28:19 y Hechos 1:8, que nos envían a ir por todo el mundo y predicar el evangelio, no tienen ningún sentido.

Lo cierto es que muchos son los llamados y pocos los escogidos, algunos se hacen indiferentes a la realidad de que el mundo se desborona día a día sin encontrar una salida, pero otros no. Otros han tomado la seria decisión de cambiar el mundo, de transformar vidas y tocar los corazones con un mensaje de esperanza. Esta vez lo veo en mis compañeros de la escuela de misiones a la que pertenezco, Comisión del Maestro Quisqueya. Aquí se levanta una nueva generación de misioneros con pasión y visión. Jóvenes lleno de entusiasmo por marcar una diferencia, hacer realidad el sueño de Dios y llegar hasta cada rincón de la tierra. Esta vez lo veo en mí, en el proyecto misionero que está en mis manos, ¨Uno Por Antigua¨. Llegare a esta isla del Caribe, alcanzare los niños, jóvenes y adultos de esta pequeña, pero necesitada nación. Dejare un legado de esperanza en cada persona que alcance, sembrare una semilla, hare realidad el sueño de Dios para una nación. Al igual que yo, otros también han dejado todo con tal de llegar al mundo con un mensaje diferente. Las vidas de mis compañeros me hacen ver esta realidad, Yudi Gonzales, una joven guerrera y hoy alcanza a los niños del Salvador. Pilar Feliz, llegara al país de Surinam y cambiara la realidad de muchos.

Y tú, que harás para que las naciones sigan conociendo que existe un Dios que quiere cambiar sus vidas. Tú decides si ser parte de esta segunda ola de misioneros que se levantan para decirle al mundo que existe una salida. Se parte, únete, acepta el reto. Tú puedes.

Por Alexander Palacio espiritusanto

Sermon Domingo 31 de Agosto Servicio Misionero 3ra AD Higuey

La Gran Necesidad Cambiar el Mundo

Por Alexander Palacio Espiritusanto

Cada diez segundos veintiséis personas mueren en nuestro mundo. De estas veintiséis personas, dos son budistas, cuatro son hindúes, cinco son musulmanes, ocho son seculares, siete cristianos, de la cuales tres son protestantes. Cada diez segundos por lo menos veinte individuos mueren sin Cristo. Mi pregunta es, ¿Qué hacemos al respecto?

Siento una gran pasión por cambiar el mundo y se que es posible. Quizás pienses que esta sea una visión un poco ambiciosa pero, es lo que siento en mi corazón y es lo que expreso cada día. No solo esta es mi pasión sino que es la pasión de Dios también. El lo expresa tantas veces, nos lo dice cada mañana y es lo que late en su corazón cada segundo.

Debemos cambiar dos aspectos fundamentales en nuestro mundo, veamos:

I. Cambiar nuestro mundo perdido.

La Pasión de Dios es cambiar el mundo que esta perdido, cada incrédulo existente en la faz de la tierra. El salmo 2 expresa: Pídeme y te daré las naciones. Es como si Dios nos dijera: Pídeme todo lo que quieras, pero ahora quiero que cambies el mundo. Pídeme lo que desees pero quiero que sepas que quiero darte las naciones para que la cambies.

En Hechos 1:8 Solo nos enfocamos por nuestra Jerusalén. La oración solo por nuestro pueblo, pero Dios nos pide más. El quiere que simultáneamente hagamos evangelismo y misiones (un alcance nacional y un alcance transcultural)
La Biblia enfoca más el hecho de alcanzar el mundo completo que nuestro vecino. Nuestra mentalidad se ha limitado y solo nos enfocamos en el hecho de cambiar nuestro pueblo y no todas las almas perdidas en todo el mundo.

II. Cambiar el pueblo cristiano.

EL pueblo cristiano necesita una reforma. Se necesita de un cambio en nuestras iglesias para lograr cambiar el mundo de afuera. Si somos más podremos llegar más lejos. Si todas las iglesias cambian con la visión de alcanzar el mundo lo lograremos.

Después de haber visto estos dos factores que debemos cambiar tenemos que reconocer que de nosotros es la responsabilidad porque nosotros hemos recibido. Si nosotros cambiamos, los demás cambiaran. Dios nos llama a cambiar el mundo porque nosotros hemos recibido. Tenemos las herramientas. Tenemos el potencial. Tenemos la capacidad, pero hemos sido egoístas. Nos hemos encerrados en nosotros mismos y no damos de lo que tenemos a quienes lo necesitan.

Todos hemos tenido etapas donde recibimos de Dios sus favores y beneficios, momentos donde dios nos llena de su presencia y somos mas que bendecidos. Yo tuve ese momento y se que tu también lo has tenido, eso significa que el te ha dado para que tu des a otros lo que el ha puesto en ti.

Se que quizás no estás disfrutando lo que tienes, porque no estás dando lo que tienes. Dios nos da mil sermones para llenarnos y mil sermones para sacarnos de lo que nos ha dado, porque somos tan egoístas y solo estamos buscando un beneficio personal. Vivimos muy cómodos, solo recibimos.

Dios encontró placer cuando dio a su hijo. Si nos damos nosotros también encontraremos placer. El dijo, este es mi hijo en quien me complazco. Al igual que Dios cuando damos encontramos placer y somos bendecidos. Así que, si no nos arriesgamos a dar, jamás encontraríamos el placer de bendecir y ser bendecido. Porque tienes, es porque Dios te pide. Eres el indicado.

Pero… ¿Por qué no nos damos? La razón es que abecés somos egoístas, en otras tenemos miedo a ser usados, pero como dije: jamás encontraríamos el placer de bendecir y ser bendecido si no nos arriesgamos.

No solo es darnos, también necesitamos un plan, porque darnos en el lugar incorrecto es un grave error, no podemos ver los frutos. Por esta razón Dios diseño un plan para su iglesia y así poder cambiar el mundo. Cambiamos el mundo cuando somos una iglesia funcional en todas las áreas. Pero estas áreas de la iglesia en muchas ocasiones carecen de personas entregadas, pero si nos damos como antes mencione, se que esto ya no seria un problema, ya que los lideres no trabajarían solo con el 20 % de toda la iglesia como mencionan las estadísticas. Este plan de Dios es revelado Juan 17:11-23. Jesús ora al padre diciendo: Que ellos sean uno como tú y yo somos uno. Pero por que ser uno. Veamos algunas razones:

1. El individualismo nos ha hecho daño. El individualismo provoca rivalidad, el individualista huye ante el problema, no se siente comprometido.

2. Unidos somos más fuerte. Podemos hacer todo lo que nos propongamos.

3. Somos más constante. Un reino dividido sobre sí mismo no prevalece.

4. Cada uno tiene su lugar. Dios nos usa a todos de maneras diversas. Todos tenemos algo que podemos hacer. Todas las áreas de la iglesia son suplidas.

5. todos tenemos una misma visión.

Si somos uno no solo tendremos la capacidad de cambiar el mundo, sino que también pondremos una sonrisa en el rostro de Dios, encontraremos placer y por fin el mundo será diferente.

Un punto mas es el caso de cambiar la iglesia de hoy. Anteriormente mencionábamos de la carencia en la que la iglesia de hoy se encuentra, pero sabemos que existe una salida. Seamos agente de cambio con nuestro ejemplo. Sabemos que no podemos cambiar a los demás con palabras en muchas ocasiones, pero con nuestros hechos y siendo una iglesia funcional podríamos influenciar de tal manera que trastornaríamos la iglesia de hoy.

Solo queda decir, arriésgate a lo sobrenatural de Dios y trastorna el mundo. Se uno con tu iglesia y sigue la visión que se persigue. Cambia tu mundo.

Por Alexander Palacio Espiritusanto

MI debocional inspirado por Hollywood



La Propuesta

La propuesta, es una película que trata una interesante historia de amor. Esta comienza con el acuerdo de una jefa y su ayudante. Ella le propone que se case con el para no ser deportada a su país de origen. El acepta la propuesta con el fin de obtener ciertos beneficios a cambio. Era todo un negocio. Finalmente el termina enamorándose de ella y amándola, no por un beneficio, sino mas bien por amor.

Cuando aceptamos la propuesta de aceptar el llamado a servir a Dios, al igual que este joven decimos que si. En muchas ocasiones para ser beneficiado como el también quería. Aceptamos la propuesta porque queremos salir del paso de tener un llamado o simplemente obtener meritos en este camino del ministerio. Por una razón o por otra, en muchas ocasiones aceptamos por las razones equivocadas; razones que no justifican una verdadera relación.

Pero dimos un paso, aceptamos. Quizás no por las motivaciones correctas pero pasamos ese fin de semana viviendo con nuestro llamado y es hay cuando nos enamoramos de verdad de lo que Dios ha puesto en nuestras manos. Disfrutamos lo que hacemos y encontramos las verdaderas razones de esa relación que en un principio solo será un negocio de intereses, hoy es por amor.

Otro día, en medio de todos. Me deslizo por el pasillo seguro de hacer la propuesta que cambiara mi vida, ahora no será Dios a mi, seré yo a El. Me acerco tomándolo de las manos y lo miro a los ojos. He puesto mis miedos a un lado, no me importa lo que ellos digan, solo se que lo haré. Me aceptarías ser tu siervo por el resto de mi vida para amarte y hacer tu voluntad. Finalmente lo dije. Desde lo más profunde de mi corazón. Guaooo… Me dijo que si….

Que hermosa historia de amor…
Por Alexander Palacio Es.

Predica domingo 23 de agosto 3ra Iglesia Asambleas de Dios Higuey Los Niveles del Creyente

Los Niveles del Creyente

Por el Pastor Yony Brea.

Base bíblica: Efesios 1:15-22

.

Según el director de la universidad de Columbia, afirman que existen tres tipos de personas en la sociedad. En el primer grupo están aquellos que no se enteran de nada de las cosas que pasan; en segundo lugar aquellos que se enteran de todas las cosas que pasan y por ultimo están quienes provocan que las cosas pasen, y de ellos nosotros debemos ser parte. Para ello debemos vivir los niveles de relación que Dios ha determinado para nosotros en Efesios 1:15-22 y otros pasajes bíblicos. Veamos.

Primer Nivel, Relación.







El nivel de relación es el fundamento del creyente, en otras palabras es el nivel básico. Un edificio sin fundamento se destruiría, un creyente sin este nivel de relación estaría en las mismas condiciones, quedaría derribado. Efesios 1:15 nos enseñan la importancia de tener una verdadera relación. En primer lugar enfoca una relación vertical, con Dios. Basados en la palabra fe que expresa Pablo a los Efesios, se enfoca en la relación que ellos tenían con Dios. En segundo lugar el texto trata de una relación horizontal, con nuestro prójimo. Enfoca el amor a nuestro prójimo que sobrepasa toda las cosas (1 Corintios 13). Un creyente debe tener una buena relación tanto con Dios como con nuestro prójimo. Dios quiere que tengamos una verdadera relación con El y que no seamos actores, que expresemos lo que somos en todo tiempo, de igual manera que le expresemos amor a los demás sin estar basados en emociones, sino en una decisión real, un verdadero compromiso con Dios y con mi prójimo.

Segundo Nivel, Revelación

En Efesios 1:17 Pablo trata la importancia de la revelación de Dios al creyente. La sabiduría de Dios es importante en todas las áreas de la vida, sea física o espiritual. El termino sabiduría tiene tanto que ver con la astucia, la sagacidad, destreza y toda habilidad. La verdad es que tenemos ojos espirituales que necesitan ser abiertos para poder conocer las verdades que nos rodean, ya que solo cuando son abiertos nuestros ojos podemos conocer desde quienes somos, hasta con quien peleamos. Además cuando nos enfocamos en saber quién es el hijo de Dios, el hijo de Dios nos revela quienes somos en él y que capacidad él nos ha dado. Ante un mundo espiritual lleno de jerarquías demoniacas que operan en las regiones celestes el creyente debe saber que su lucha no es solo física, sino espiritual. Cuando los ojos del creyente son abiertos este puede ver las operaciones del enemigo y así puede combatirlas.

Al Dios revelarnos sus verdades, entendemos quienes somos, con quien peleamos y que El ha hecho por nosotros. Nos damos cuenta que las usted espirituales de maldad solo se combaten con una armadura espiritual (Efesios 6:10). Saber cómo vestirnos y permanecer con esta armadura se hace importante ya que todas las batallas que tenemos primero se pelean espiritualmente en las regiones celestes; para esto se requiere de tener nuestros ojos espirituales abiertos, todo esto gracias a al nivel de revelación que todo creyente debe vivir. Antes de David pelear contra Goliat, peleo con las huestes espirituales y por eso gano su batalla física con el gigante. Antes del pueblo de Israel pelear contra Amalec, Moisés subió a la montaña a combatir con las huestes de maldad. Cuando fueron contra Eliseo, eran más los que estaban con el que con el ejército enemigo, aunque en el espíritu. Toda batalla que tenemos la debemos ganar primero en el mundo espiritual, pero esto solo lo logramos cuando vivimos en un nivel de revelación de Dios donde recibimos la sabiduría necesaria para saber quiénes somos y como debemos actuar.

Tercer nivel, Conquista.




Finalmente el tercer nivel nos lleva más allá de lo esperado. El nivel de conquista nos enseña lo que Dios ha hecho por nosotros y donde nos ha colocado. Efesios 1:19-22 dice que él ha sido sentado por encima de todo principado y que tiene toda autoridad y esta autoridad se la dio a la iglesia. Gracias al sacrificio de Cristo hoy tenemos toda autoridad sobre todas las fuerzas demoniacas y todo, está por debajo de nuestros pies. Esta condición Dios nos la ha dado con el propósito de que logremos conquistar tanto en el mundo físico como en el mundo espiritual. Si El ha conquistado, nosotros también, ya que tenemos el derecho legar, gracias a Cristo, sobre todas las cosas.



Estos tres niveles son vitales en la vida del cristiano. Todos hemos sido llamados a tener una relación, Dios nos ha dado su revelación y tenemos la autoridad para conquistar. Solo que en ocasiones no sabemos quiénes somos. Vivimos como gatos domésticos cuando en realidad somos leones, pero nos han engañado dándonos otra mentalidad. La verdad es que somos hijos y el nos ha dado lo suficiente para lograr alcanzar cada nivel. Como hijos podemos acercarnos a Él cuando queramos y el nos dara lo que pidamos.

MEMORANDUM DE DIOS



Hoy: YO, DIOS, estaré manejando todos tus problemas.
Por favor, recuerda que yo te tocaré tu corazón cuando necesite de tu ayuda.

Si te enfrentas a una situación que no puedes manejar,
no intentes resolverla.
Te pido amablemente que la coloques en la bandeja AQSDPH
("Algo que sólo Dios puede hacer")

Me encargaré del asunto en Mi tiempo, no en el tuyo.

Una vez que hayas depositado tu problema, déjalo ahí, olvídate de él, no intentes retirarlo, sólo harás que se retrase la solución del mismo.
Si fuese una situación que tú consideras poder manejar por ti mismo,
pido, no obstante, que, por favor lo consultes Conmigo en oración,
para que puedas asegurarte de que tomarás la decisión adecuada.

Debido a que yo no duermo nunca, ni me adormezco jamás,
no hay razón por la cual tengas que perder tu sueño en la madrugada
a causa de las preocupaciones.....
Descansa en Mí.
Si deseas contactarme, estoy a la distancia de una oración.

Además, considera lo siguiente:
Sé feliz con lo que tienes.
Si encuentras difícil el dormir por las noches, recuerda a las familias desamparadas
que no tienen un techo dónde dormir...
Si te encuentras atorado en el tráfico, no desesperes.
Hay gente en este mundo para quienes tan sólo manejar es un privilegio.

¿Has tenido un mal día en el trabajo?
Piensa en aquellos que están por años sin poder conseguir uno.

¿Estás descorazonado por una relación sentimental deteriorada?
Piensa en aquellos que no saben lo que es amar y que jamás han sido amados.

¿Si te entristeces porque se termina el fin de semana?
Piensa en la mujer con vestidos raídos
, que trabaja 18 horas al día lavando ropa ajena,
a fin de alimentar a sus hijos.
¿Se dañó tu vehículo en medio de la carretera y
lejos de toda ayuda posible?
Piensa en los parapléjicos que con el mayor gusto
tomarían tu lugar por caminar la distancia.

¿Has notado que te apareces nuevas canas?
Piensa en los enfermos de cáncer bajo quimioterapia, que desearían tener tu cabello.

¿Has llegado a los 50 y te has enfrentado a una terrible pérdida y te preguntas: Cuál es el propósito de esta prueba? ¡Sé agradecido!
Existieron muchos que no vivieron hasta esa edad para averiguarlo.

¿Te encuentras en un momento de la vida en que eres objeto de la amargura,
ignorancia, pequeñez o envidia de la gente?
Recuerda: las cosas que yo permito, son para tu propia salvación.
No te permito cargar cargas pesadas que no puedes soportar.
Yo soy tu Padre, y un padre ama con locura a sus hijos.
Sólo pemito lo que te enseña a buscarme y amarme.
¿Sientes que no ayudas a los demás como quisieras?
Parte de la solución está en tus manos:
envíales este Memorandum, podrías, sin quererlo, iluminar el día de alguien más.

Porque Ofrendar Para las Misiones

por Alexander Palacio Es.

Una orden divina, una promesa real.
Jesús dijo: Dad, y se os dará; medida buena, apretada, remecida y rebosando darán en vuestro regazo; porque con la misma medida con que medís, os volverán a medir. Lucas 6:38 • El ofrendar es un principio instituido por Jesús, el cual tiene un mandato y una promesa: Dad y Recibirás. •
El dar es un acto que conlleva mucha humildad y desinterés. No damos para recibir, damos porque amo a los demás y somos agradecidos. Un ejemplo a seguir, grandes resultados En aquellos días unos profetas descendieron de Jerusalén a Antioquía. Y levantándose uno de ellos, llamado Agabo, daba a entender por el Espíritu, que vendría una gran hambre en toda la tierra habitada; la cual sucedió en tiempo de Claudio. Entonces los discípulos, cada uno conforme a lo que tenía, determinaron enviar socorro a los hermanos que habitaban en Judea; lo cual en efecto hicieron, enviándolo a los ancianos por mano de Bernabé y de Saulo. Hechos 11: 27-30 • Siempre habrán otros con más necesidades que nosotros. • Ofrendamos para suplir las necesidades de otros. Las necesidades pueden ser materiales, espirituales, al ofrendar invierto en la salvación de las almas. •
Podemos ser movidos por Espíritu Santo a ofrendar. Si Dios nos revela el problema es porque podemos dar una solución. A los discípulos no se les ordeno que ofrendaran, ellos solo conocían la necesidad y por su propia cuenta determinaron enviar una ofrenda. • Con mi ofrenda puedo llegar a todo el mundo y así cumplir con la Gran Comisión Diversas maneras de ofrendar, el mismo compromiso Existen diferentes formas en que podemos ofrendar para misiones las cuales nos llevan en un proceso ascendente: •

Ofrendas única.
Esta comienza con pequeños pasos de fe, dando lo que me sobra o haciendo pequeños aportes a proyectos misioneros. Dejando de tomar una coca cola y dando el dinero para las misiones. •

Patrocinio mensual a misioneros.
Es un compromiso donde nos sacrificamos y aportamos a las misiones, siendo la familia misionera parte de nuestro presupuesto mensual. •

Promesas de fe.
Es un compromiso a ofrendar aun no tenga los recursos, pero me comprometo en fe creyendo que Dios proveerá.